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La historia nos muestra el lado oscuro de los programas, el mercadeo descarado de la imagen del personajes y la alienación que sufren los pequeños que harán lo imposible por obtener el nuevo juguete de su ídolo o los cereales que él anuncia, una imagen que no siempre es expontánea o eduativa como se pretende; es una versión de lo que hemos visto con el payaso de los Simpson.
Una película entretenida pero un tanto ingenua pues las interpretaciones de Norton y Williams no aportan mucho a un guión simple y un tanto predecible. Divertida en cierta forma pero aleccionante en otras.
"Empieza como una deliciosa y salvaje sátira de los shows de televisón para niños, y por ello es una pena que se tuerza, se salga fuera de control y se deslice aburridamente antes de volverse a controlar en un inteligente aunque prolongado final" (Kevin Thomas: Los Angeles Times)
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Director: Danny DeVito. Interpretes: Robin Williams (Randolph Smiley), Edward Norton (Sheldon Mopes), Catherine Keener (Nora Wells), Danny DeVito (Burke Bennett), Jon Stewart (Marion Frank Stokes), Pam Ferris (Tommy Cotter), Harvey Fierstein (Merv Green), Michael Rispoli (Lawrence 'Spinner' Dunn), Vincent Schiavelli (Buggy Ding-Dong), Danny Woodburn (Angelo Pike). Año: 2002. Duración: 109 min.