Conocido en su barrio por su condición de solitario, el canoso Forrester es un hombre cuyo misterio y excentricidad se acercan a límites casi míticos. Cuando Jamal, un destacado estudiante y atleta afroamericano que ha sido fichado por un entrenador de elite gracias a su brillantez dentro y fuera de la cancha, logra colarse en su apartamento con una cartera repleta de sus trabajos literarios, inesperadamente ambos obtendrán algo a cambio. Obligado a dejar a un lado prejuicios como el color de la piel y otras suposiciones, Jamal no sólo va a encontrar a su admirador más fiel, sino a un mentor que le retará cambiando su vida para siempre; mientras que Forrester encontrará la primera razón, en muchos años, para salir de la soledad que se había autoimpuesto.
La película me agradó pero sentí que estaba viendo una versión, quizás por lo que tiene en común con alguna otra que he visto, tales como "Perfume de Mujer", "Rojo", "Good Will Hunting" o "La Sociedad de los Poetas Muertos"; pero sin duda, es un buen argumento, políticamente correcto e ideal: un encuentro creativo intergeneracional e interracial; apartando los tópicos es un muy buen ejemplo de lo que puede lograrse con motivación y espíritu de superación.
Dirección: Gus Van Sant. Intérpretes: Sean Conner (William Forrester), Robert Brown (Jamal Wallace), F. Murray Abraham (profesor Robert Crawford), Anna Paquin (Claire Spence), Busta Rhymes (Terrell), April Grace (señorita Joyce), Michael Pitt (Coleridge), Michael Nouri (Dr. Spence), Richard Easton (Matthews), Glenn Fitzgerald (Massie), Zane R. Copeland Jr. (Damon), Stephanie Berry (Janice). Título Original: Finding Forrester. Paises: USA/Reino Unido. Año: 2000. Duración: 136 min.